Esta semana Caja Arequipa presenta a los 60 finalistas de la segunda edición del Premio Orgullo Emprendedor, un certamen que busca visibilizar las historias de esfuerzo, resiliencia y superación de microempresarios de todos los rubros y regiones del Perú.

La convocatoria, que se inició en julio, superó las 800 postulaciones provenientes de todas las regiones del Perú. Entre ellas, destacaron historias que reflejan la capacidad de innovar con soluciones ecoeficientes, el liderazgo de mujeres que impulsan sus negocios y la resiliencia de quienes han sabido salir adelante a pesar de las adversidades.

Tras un riguroso proceso de evaluación, se seleccionaron 60 finalistas que reflejan el esfuerzo, innovación, sostenibilidad e impacto social en sus comunidades y su rol como motor del tejido laboral en el país.

Ellos serán evaluados por un Jurado Externo, conformado por un selecto grupo de líderes del mundo empresarial, que seleccionará a los 18 ganadores en las seis categorías del concurso: Emprendedor Joven, Fuerza Mujer, Emprendimiento Innovador, MYPE Sostenible, Valor Familiar y Emprendimiento Resiliente.

Los galardones de esta edición incluyen S/ 200 mil en premios, entre capital de trabajo, becas de formación, seguros de vida y asistencia técnica para el desarrollo empresarial. Además, se entregará el Gran Premio Caja Arequipa a la mejor candidatura entre los 18 ganadores del concurso.

Los ganadores serán anunciados oficialmente el próximo 5 de noviembre, y la ceremonia de premiación se realizará el 19 de noviembre, donde se celebrará no solo a los emprendedores premiados, sino también sus historias y al impacto positivo que generan desde sus negocios.

Historias que inspiran

Los efectos del Premio Orgullo Emprendedor se evidencian en casos como el de Alejandra Rivera, emprendedora residente en Cusco que recibió el Gran Premio en la edición del concurso Orgullo Emprendedor 2024.

Gracias al capital obtenido, logró implementar dos nuevas tiendas en el centro histórico de Cusco, ampliando significativamente su capacidad operativa. “Esas nuevas tiendas no solo ayudaron al crecimiento del negocio, sino que nos permitieron seguir impactando a más tejedoras altoandinas y artesanos locales”, cuenta Rivera.

Ella destaca, además, el valor de la formación recibida: “Las capacitaciones reforzaron nuestros conocimientos estratégicos para la gestión de la empresa. Participar en este concurso también te permite ver la manera en que gestionas tu negocio frente a otros emprendimientos a nivel nacional”, mencionó.

Con esta iniciativa, Caja Arequipa reafirma su compromiso con los emprendedores de todas las regiones, promoviendo el crecimiento sostenible de sus negocios y el fortalecimiento del tejido social y económico del país.