Entrevista a nuestro Gerente Central de Negocios Wilber Dongo Díaz, por parte del Microfinazas.

—¿Qué consecuencias en la economía peruana y, principalmente, en el sistema financiero tiene el conflicto entre Rusia y Ucrania?

El conflicto tiene un efecto global, la subida de los precios que se está apreciando en los diferentes bienes y servicios, afecta a toda la población, con mayor impacto en los hogares más vulnerables económica y socialmente, que ahora, para cubrir sus necesidades básicas de alimentación y servicios, tienen que destinar mayores recursos, mayor egreso de dinero. Los economistas alertan de una alza inflacionaria, entonces la inflación podría fomentar un alza de la morosidad en los créditos, debido a que las personas están destinando sus ingresos a su necesidades básicas de su canasta familiar y no les alcanzaría el dinero para cubrir sus cuotas. Por otro lado, las entidades financieras para conservar la calidad de sus activos, comenzaran a restringir los créditos, eligiendo a los clientes con mejor perfil de cumplimiento. Evidentemente estamos presenciando que sí hay un impacto negativo en la economía peruana.

—En marzo debería culminar el periodo de reprogramaciones que se dieron a los créditos estatales como Reactiva y FAE, ¿entonces es posible esperar un incremento de la mora?

El gobierno ha anunciado que se prorroga hasta fines de abril. Las reprogramaciones en el sistema financiero en promedio están en menos de 10%, en el sistema de cajas municipales estamos en 14%. En promedio el 90% de las carteras están sanas, ya sin reprogramaciones. Se está apreciando un sinceramiento de morosidad en las entidades microfinancieras, eso sí con mayor lentitud que las del sistema bancario, la razón principal es que sus clientes son personas naturales dedicadas a emprendimiento de micro y pequeña empresa, con patrimonios muy pequeños y fueron dañados considerablemente, muchos de ellos siguen luchando en esta crisis para sacar adelante a sus familias. Considero que a ellos se les debe seguir dando el apoyo.

En el caso del sistema bancario, se aceleró el sinceramiento de los créditos reprogramados, provisionarón en el año 2020 y castigarón en el 2021. Mientras que el apoyo estatal al microcrédito se dio recién en setiembre de 2020 y luego sacaron FAE Turismo y FAE Mype, entonces se espera un sinceramiento hasta finales de agosto de este año.

—Precisamente la SBS espera un sinceramiento lento de la mora en el sistema microfinanciero durante este año, ¿en cuánto podría incrementarse la mora?

En lo referido al sistema de cajas municipales la mora en promedio está en 5.20% a enero, las edpymes y cajas rurales están entre 8% y 9% y de las financieras que no se dedican al retail están encima de 6%. El efecto de la morosidad en los EEFF de cada entidad depende de las provisiones que hicieran cada una de ellas, a mayor nivel de provisiones menor impacto de la morosidad en sus resultados. Algunas entidades tuvieron la precaución de realizar provisiones voluntarias en el período de pandemia para enfrentar este período de sinceramiento.

En líneas generales, estimo que en promedio la morosidad se incrementará en 2 puntos porcentuales de lo que se terminó el año anterior, en todos los sistemas del segmento microfinanciero hasta el mes de agosto. Mientras que para el segundo semestre del año bajará ligeramente el ratio de morosidad explicado por los castigos que se hagan las carteras y el crecimiento de su portafiolio con nuevos créditos. Sin embargo, no olvidemos que para castigar se necesita que estén totalmente provisionadas dichas deudas, generando por lo tanto pérdidas en el estado financiero.

—¿Cómo está la calidad de cartera de Caja Arequipa? Precise la situación de cada una de los tipos de cartera

Antes de la pandemia manejamos un riesgo de crédito en promedio mensual entre 4.20 y 4.50 de morosidad. Luego de las reprogramaciones que se dieron entre el 2020 y 2021, la cartera morosa se redujo a 3.20, ahora estamos en 3.50. Todavía tenemos una mínima parte de cartera reprogramada y el 90% del total de esta cartera está cumpliendo con sus pagos. Estimamos que de darse problemas con ese 10% que no viene cumpliendo con su crédito, la cartera morosa subiría a un 4%, indicador muy por debajo del promedio del sistema financiero. No obstante, debido a las provisiones que hemos realizado en los años anteriores, terminaríamos el año sin efectos financieros en la utilidad esperada que es de 95 millones de soles.

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—¿Cómo está la mora en el desagregado de la morosidad por tipo crédito?

En todo el sistema financiero, en promedio, la mora en la mediana empresa está en 9%, pequeña empresa en 8%, microcrédito en 5%, consumo en 4%, hipotecario entre 2 y 3%, corporativo en menos de 0.5%. Se tiene una labor por realizar aún para reducir la morosidad de la mediana y pequeña empresa, es el umbral entre las microfinanzas y la banca comercial.

—La incertidumbre política continúa afectando a la economía, ¿considera que la última presentación ante el Congreso el Presidente Castillo tranquilizó a los agentes económicos?

Puedo decir que lo intentó, trató de conciliar con el Legislativo. Sin embargo, los escándalos políticos y constantes denuncias por corrupción que involucran al Presidente hace desconfiar a los agentes económicos de su palabra. Además, no olvidemos que el panorama internacional no es favorable para el país, S&P acaba de reducir la calificación crediticia soberana en moneda extranjera a largo plazo de nuestro país e inmediatamente ha tenido efecto en la calificación de los principales bancos, entonces creo lo que se viene en los próximos meses está lejos de ser el fin de la crisis que afronta el país.

MEDIANTE SUBSIDIARIAS

—Hace poco el exsuperintendente de la SBS Juan José Marthans afirmó que la banca tradicional entraría en el próximo quinquenio a competir directamente con las entidades microfinancieras y las exhortó a unir esfuerzos ¿comparte lo dicho?

Importante la voz de Juan José, sin embargo coincido en parte. Se ha demostrado que durante los 40 años que tiene las microfinanzas en el país, sí es posible prestarle dinero a las personas sin necesidad que deje de garantía a su casa, si vemos la morosidad promedio del sistema bancario y de las principales entidades de microfinanzas hoy son similares. La gestión y estrategia que han implementado las entidades microfinancieras han demostrado que con una tecnología apropiada de evaluación, dichos clientes sí cumplen con la devolución oportuna de sus compromisos.

En riesgo crediticio de la banca y las microfinanzas están iguales. Por ejemplo, la mora promedio en el sistema de cajas municipales es de 5%, en Caja Arequipa estamos en 3.5%, mientras los bancos están en 3.90%. Por otro lado, la diferencia radica puntualmente en el costo operativo que es mayor en el sistema microfinanciero por los pequeños montos de transacción y el alto volumen de operaciones y numero de personal.

Como dice Marthans, la banca tiene una tasa de rendimiento promedio en todos sus créditos entre 8% y 9%, mientras que las microfinancieras tenemos entre 20% y 22%. Por ende, en un mercado que se está consolidando y bancarizando cada vez a más personas es lógico que la banca preste especial atención en el sector microfinanciero, pero considero que la mentalidad de los directivos del sector bancario tiene que cambiar y que conocer al cliente tipo de una entidad de microfinanzas requiere de un cambio en su mindset corporativo, en su estructura orgánica, procesos y en especial en tener la sensibilidad humana que se necesita para atender en este sector, y eso llevará más tiempo.

Pero es un proceso, si las entidades microfinancieras no cuidan a sus clientes, los deslumbran y atienden más personalizadamente, ese margen (de rendimiento) que les permite atender será asumido por los bancos u otros actores más innovadores.

—¿Y en qué discrepa con lo dicho por Marthans?

En lo referido a que los bancos ingresarán directamente a competir como banco con las entidades microfinancieras, considerando que la metodología de un banco no le permitirá evaluar adecuadamente créditos de 500 o 5000 soles. En mi opinión, los bancos entrarán a competir mediante sus subsidiarias, las que serán debidamente reforzadas con personal especializado en microfinanzas.

El BCP entrará con más fuerza con Mibanco, el BBVA con Confianza. Los bancos serán más agresivos para tener mayor participación en el sistema microfinanciero, pero mediante sus subsidiarias debido a que estás son sus entidades especializadas en el modelo de negocio de las microfinanzas.

—¿Para cuándo prevé esa mayor interés y competencia de los bancos con las microfinanceras?

A mitad de este año empezaremos a ver esa mayor competencia. La pandemia paralizó el avance. En los dos últimos años se avanzó con metodologías digitales y análisis de datos. Ahora el perfilamiento de un cliente que antes lo hacía un asesor o analista de crédito mediante una visita a la vivienda o negocio del cliente, es apoyado todo este reconocimiento y evaluación de manera digital. La rapidez de la decisión está del lado de las entidades que cuentan con un área de inteligencia de negocios fuerte. Lamentablemente las pequeñas microfinancieras no avanzaron en ese tema, son pocos los actores que avanzaron realmente en la transformación digital y en el trabajo de cambio de cultura para su adaptación.

Ante este escenario, considero que ya estamos en un período de consolidación y dentro de tres a cinco años se reducirá el número de entidades del sistema microfinanciero. Cuando el mercado se consolida quedan menos actores.

Fuente: MICROFINANZAS